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Por órdenes de Trujillo, aquél le había encargado que liquidara a uno de ellos, Tancredo Martínez, antiguo cónsul dominicano en Miami, quien se fugó a México y pidió asilo. Bonachea León lo había hecho muy mal; fue a buscarlo a la compañía de seguros donde trabajaba y le disparó un balazo en la cara; se la destrozó pero no lo mató. Por eso había es
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el gobierno de Juan José Arévalo lo expulsó del Ejército y los jueces lo condenaron a muerte, una condena diferida varias veces. Su fuga, el 11 de junio de 1951, de la Penitenciaría, lo hizo célebre en todo el país. Había dos versiones sobre ella.
Mario Vargas Llosa • Tiempos recios (Spanish Edition)
Soy la hija del doctor Arturo Borrero Lamas y la mujer del doctor Efrén García Ardiles, dos amigos del Presidente.
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LOS 456 (EL SOBREVIVIENTE UN HOMBRE QUE VIVIÓ ENTRE GUERRAS nº 1) (Spanish Edition)
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Carlos Gacel Castro no era guatemalteco sino cubano. Abbes García lo había conocido en México, cuando, becado por Trujillo, estudiaba aquellos cursos policiales y espiaba para el Generalísimo a los exiliados dominicanos en el país azteca.
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Trinidad Oliva era un hombre que picaba alto. Se sentía injustamente postergado por el gobierno. Había estado preso en tiempos de Jacobo Árbenz por conspirar contra el régimen y no tenía la menor simpatía por Castillo Armas, de modo que podía ser una pieza clave para el proyecto.
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Se refugió en Colombia y luego pasó a Honduras, donde se dedicó en cuerpo y alma a conspirar contra el gobierno de Jacobo Árbenz. Allí fundó el llamado Movimiento de Liberación Nacional e hizo el triple pacto con el general Ydígoras Fuentes y un civil con muchos sesos, el doctor Córdova Cerna, antiguo abogado de la Frutera y colaborador y ministro
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La persecución de quienes habían colaborado de una manera u otra con los gobiernos de Juan José Arévalo y de Jacobo Árbenz seguía a toda máquina, pese a que aquél, en los meses siguientes, discretamente se iría apartando cada vez más de éste.