sobre la esencia del misterio de lo humano

La memoria es el sistema digestivo del conocimiento. Se ocupa de descomponer las percepciones y los pensamientos con el objetivo de facilitar su asimilación. También incorpora aquellos recuerdos que han de aumentar nuestra potencia física o espiritual, a la vez que desecha u olvida aquello que es inútil o perjudicial para la vida. Como decía

Perhaps, as Borges concludes in his story, it is forgetting, not remembering, that is the essence of what makes us human. To make sense of the world, we must filter it. “To think,” Borges writes, “is to forget.”

Muy recientemente, unos psicólogos de Berkeley y de la universidad de Utrecht han constatado que los chimpancés rectifican sus creencias cuando los hechos les demuestran que están equivocados . Es decir, procesan la información que reciben y de acuerdo con ella modulan sus decisiones según la evidencia disponible.

Si llevamos años contando noticias científicas que han derribado el mito de que la especie humana es la única inteligente sobre la faz de la Tierra, a algunas personas les podría quedar el orgullo de pensar que reinamos sobre otras especies gracias a una capacidad que sí era única: la de razonar.

Pues ya tampoco somos únicos en eso, gracias a que la capacidad racional de unos investigadores les ha llevado a diseñar experimentos que permiten demostrar que los chimpancés también cambian de creencia ante nuevas pruebas y adaptan sus elecciones cuando reciben nueva información relevante.

Al igual que Sócrates, ¿saben los animales que no saben?, con el que nuestra colaboradora Laura Camón expone brillantemente cómo, desde los chimpancés a las abejas, la ciencia ha revelado que la metacognición tampoco es patrimonio exclusivo del ser humano.

In a world like that, my mind goes to, “How do you choose those 10 people?” One way is to choose people who are 10 times better than everyone else, who can produce 10 times more, and who will be 10 times more valuable to the business. The other way is to choose people based on whether you enjoy working with them, if they make you better, or if they

The question I keep returning to is: what do we actually want people for? In the past, we wanted them for labor, efficiency, and technical skills. Now, we want them for that, but we also want them for more interpersonal things. The test is: would I rather work with this person—or work alone with better tools? That will determine if they’ll be in my

We like to see what humans are capable of. We like to put ourselves in an arena and battle-test ourselves. Nobody will drive anymore out of necessity, but Formula 1 will stay popular. Computers beat us at chess, and yet we still love watching humans play.