Para poder ser libres, necesitamos que el gobierno resuelva ciertos problemas. Un gobierno es el único capaz de parar a un invasor o acabar con un monopolio. Pero eso es solo el principio. Cuando la gente tiene la sanidad garantizada, está menos preocupada por el futuro y tiene más libertad para cambiar de trabajo. Cuando los niños pueden ir a la

El autor del presente libro no es de ningún modo un filósofo. No ha comprendido el Sistema — caso de que exista uno, y caso de que éste redondeado: ya tiene bastante su débil cerebro con la tarea de imaginar la prodigiosa cabeza de que debe uno disponer en nuestra época para contener proyecto tan descomunal — . Aunque se lograse reducir a una

Los que más hacen correr la sangre son los mismos que creen tener a su lado el derecho, la lógica y la historia.

Nuestra sociedad debe defenderse, pues, no tanto del individuo como del Estado.

¿O sea que ahora comprende usted que Árbenz nunca fue comunista? —le pregunto—. Que era más bien un demócrata, algo ingenuo tal vez, que quería hacer de Guatemala un país moderno, una democracia capitalista. Aunque, ya en el exilio, se inscribiera en el Partido Guatemalteco del Trabajo, nunca fue un comunista de verdad. —Era un ingenuo, sí, pero al

El discurso requiere separar la opinión propia de la identidad propia. Los individuos que no poseen esta capacidad discursiva se aferran desesperadamente a sus opiniones, porque, de lo contrario, su identidad se ve amenazada. Por ello, el intento de hacerles cambiar de opinión está condenado al fracaso. No oyen al otro o no lo escuchan. Pero la